Es verdad que hace un tiempo deje de soñar
empece a preocuparme por lo que en verdad
importa, mis obligaciones, mis responsabilidades,
y mi futuro y simplemente deje que el color escapa
que vida se tornara en blanco y negro.
Que los fotogramas claves dejaran de tener
un movimiento diferente y fuera como si todos
fueran iguales, en ese momento me convertí
en una persona vacía sin sueños, ni anhelos,
ni fantasías. Donde estoy y como me encuentro
es que creo que ya ni siquiera siento,
donde están los momentos que pasamos
y fue de aquellos tiempos en que era feliz.
Una vida sin creer en nada, ni en nadie.
Cuando todo se ve perdido y ni en mis
escritos encuentro paz, arrastro palabras
sin sentido, las dejo flotando y brillan
tanto que es imposible comprenderlas
suelen moverse en direcciones opuestas
a tal grado que el mensaje se confunde
y dices cosas que no siento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario